¿Cuántos de ustedes descartan y tiran a la basura las semillas de la calabaza al momento de cocinarla?... imagino que la gran mayoría. En realidad están cometiendo un grave error, porque se están privando de disfrutar de uno de los más fantásticos snacks.
Estas semillas son deliciosas y en la forma en que la vamos a preparar quedarán bien crocantes, saladitas y con un gusto a limón espectacular. El costo económico de hacerlas es prácticamente nulo y encima encierran un millón de propiedades saludables (a excepción de la sal que le agregaremos). No es necesario guardarlas en la heladera, y solo hay que tener el recaudo de ponerlas en un frasco cerrado para evitar que se humedezcan.
¿Pero por qué decimos que son tan saludables? Porque contienen una amplia variedad de nutrientes: El magnesio facilta la función cardíaca, la formación adecuada de los dientes y de los huesos, la relajación de los vasos sanguíneos y la función apropiada del intestino . El zinc refuerza el sistema inmunitario, el crecimiento y la división celular, el estado de ánimo, los sentidos del gusto y el olfato, la vista y salud de la piel, la regulación de la insulina y la función prostática y sexual masculina.
También es una de las mejores fuentes de omega-3 (grasas saludables) de origen vegetal, antioxidantes y fibras . Es un fitoestrogeno natural y estudios sugieren que podría conducir a un aumento significativo del colesterol bueno “HDL” así como disminución de la presión arterial, bochornos, dolores de cabeza, dolor articular y otros síntomas menopáusicos en las mujeres postmenopáusicas.
Son una fuente rica de triptófano, un aminoácido (bloque de construcción de las proteínas) que su cuerpo convierte en serotonina, que a la vez se convierte en melatonina, “hormona del sueño” y lo regulariza si uno toma el recaudo de consumirlas antes de ir a la cama, junto con un carbohidrato como una fruta pequeña. También funciona como anti inflamatorio y es bueno para aliviar la artritis.
Fuente de información: http://espanol.mercola.com/boletin-de-salud/beneficios-de-las-semillas-de-calabaza.aspx
Ingredientes:
Semillas de calabaza: ..... contenido de 1 calabaza
Jugo de limón: ................. 2 cdas. soperas
Agua: ............................... 4 cdas. soperas
Sal: .................................. 1/2 cda. de té
Preparación:
1. Cortamos la calabaza por la mitad en su parte más ancha y valiéndonos de una cuchara le retiramos todas las semillas.
2. Las introducimos en un colador y las ponemos bajo el agua del grifo, revolviendo enérgicamente con los dedos y separando así los hilos de las semillas.
3. Una vez que las hemos limpiado bien, las escurrimos y las llevamos a secar a un papel absorbente de cocina o unas servilletas descartables.
4. Las dejamos varias horas hasta que se sequen. Si las pueden poner a los rayos del sol mejor, porque el proceso se acelerará mucho, aunque si las dejan al aire libre deberán protegerlas de los insectos.
5. Hacemos una especie de salmuera mezclando 2 cdas. soperas de jugo de limón con 4 cdas. soperas de agua y media cda. de té de sal fina.
6. Llevamos las semillas a una sartén a fuego medio y agregamos la salmuera que preparamos.
7. En poco tiempo verán que el líquido empieza a burbujear y se irá consumiendo rápidamente.
8. Cuando ya casi se haya consumido en su totalidad, movemos enérgicamente la sartén o revolvemos con una cuchara de madera. Esto nos asegurará la distribución homogénea de la sal que se irá escarchando en cada una de las semillas.
9. Una vez reducido todo el líquido podremos ver como la sal se ha pegado a la superficie de las semillas en la proporción exacta. Deberemos dejarlas al fuego hasta que se tuesten un poquito y escuchemos el primer crepitar. Quédense tranquilos que la costra quemadita que se forma en la superficie de la sartén es fácilmente removible ponéndola bajo el agua.
10. Solo nos resta disfruarlas. Les puedo asegurar que son realmente adictivas para comerlas solas.
Aunque también la podremos usar como complemento y decoración de varias comidas: por ejemplo para añadir un toque crocante y de gusto a una sopa de vegetales horneados con curry picante que podrán ver clickeando aquí o en la imagen de abajo.
muy rico Diego! lo pondré en práctica!
ResponderEliminarEspero que te guste tanto como a mi :)
EliminarGracias Diego!! Un snack de media mañana para llevar al trabajo!!
EliminarIdeal, mas ricas que las papas fritas.
Eliminarque bueno!!! yo soy de las que las guarda y las tuesta. En casa las consumimos así solas o bien las uso para procesarlas junto a otras semillas y agregarlas a las ensaladas, pero nunca probé de esta manera!
ResponderEliminarVas a ver que hace la diferencia. Sobre todo el limón le da un toque espectacular.
EliminarHola, gracias por la receta! Pero, sin probarlas pregunto, no hay que sacarle la càscara? Esa funda es facil de comer? Al tostarlas se vuelve mas masticable? Saludos y gracias otra vez!! Elizabeth
ResponderEliminarNo hay que sacarle ninguna cáscara y al tostarlas se hace más crocante y quebradiza. Quedan riquísimas, adictivas.
EliminarSe ven muy buenas!! Una consulta, se pueden preparar sin sal? Gracias
ResponderEliminarMaría Eugenia
Esa es una pregunta que te la deberías responder vos. No es muy difícil. Saludos! :)
EliminarTe escribí por facebook que no sabía cómo utilizarlas, no leí primero el blog! Muchas gracias, Diego! Dos preguntas: se puede hacer con semillas de otro zapallo? Por ejemplo cabutino? Se puede poner menos sal? Espero tu respuesta, gracias😉
ResponderEliminarImagino que si se puede hacer con otras variedades, es cuestión de probar cual es mas rica. Respecto de la sal le ponés a tu gusto, como siempre.
EliminarNunca las hice así. . . Buenísimo: fácil, rico y sano ¿Qué más se puede pedir? Gracias Diego, un abrazo.
ResponderEliminarTe las super recomiendo Adri, beso grande!!
Eliminarmmmm, que rico!!!, yo las dejaba secar al sol, siempre hago eso, tengo muchos zapallos de los que coseche, y la semillas las guardo para volverlas a sembrar, pero hare un poco de esta forma, yo las comia de chica solas, sin sal, probare tu receta.Besos!!!
ResponderEliminarEspero tu parecer amiga :)
EliminarO sea..... Es como hacer una GARRAPIÑADA , pero salada , ¡que buena idea !!!
ResponderEliminarY la verdad que en la dieteticas las cobran a precio del oro y es una pavada hacerlas asi
Muchas gracias
Claaaro!! Viva la cocina casera. Aparte no vi ninguna dietética que te las venda alimonadas. La diferencia es brutal, quedan realmente deliciosas.
EliminarMuy buena idea y gracias Diego.
ResponderEliminarDe nada Roberto! Que te aproveche!!
EliminarGracias por compartirlo. Era una costumbre en mi casa, mi madre nos preparaba este snack que nos duraba apenas minutos. Ahora es mi turno de prepararlas para mis hijas.
ResponderEliminarDisfrutá ese momento Graciela, lindo y simbólico darle amor a los hijos en forma de semillas no?
EliminarHola Diego !!
ResponderEliminarGenial la receta !!
una consulta ¿se podrá realizar alguna versión sin y/o una dulce ? Convivo con personas hipertenzas,que tienen prohibido el consumo de sal .
Gracias !!
beso
No le pongas sal y ya. Si lo haces dulce sería como una garrapiñada. tengo la receta en el blog en la sección postres y dulces. Besos Layla :)
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