No es la primera vez que cocinamos en casa unas Alitas de Pollo Caramelizadas, ya que es una de las comidas favoritas de mis hijas, por lo crocantes, dulces y adictivas que resultan. Pero para no aburrirme ni aburrirlas, siempre intento ir haciendo variaciones en la receta, tratando de encontrar nuevos y mejores sabores.
En esta oportunidad les presento una de las combinaciones que más me gustaron, porque además de lograr un sabor más complejo que en otras ocasiones, creo que también pude alcanzar un equilibrio perfecto entre lo dulce, lo picante y lo salado. Así fui mezclando algunos ingredientes peruanos y mexicanos.
Utilicé como base de la salsa el peruanísimo ají amarillo. Para los que todavía no lo conocen, les diré que tiene muy poco que ver con el morrón amarillo que conocemos en Argentina y muy a pesar de su nombre, en realidad se trata de un ají alargado de un color naranja intenso. Su gusto es tan delicioso que se convirtió en uno de los pilares básicos de la cocina de aquél país. Usé también una salsa picante estilo mexicano a base de Chile Habanero, además de mostaza, jugo de naranja, limón y salsa de soja. No pudieron faltar el ajo, el jengibre y el orégano que redondearon un gusto espectacular.
Ingredientes: (para 3 personas)
Alas: ................................. de 6 pollos
Pasta de ají amarillo:........ 1 cda. grande
Mostaza: ........................... 1 cda. grande
Salsa Picante: ................... 2 cdas medianas
Azúcar: .............................. 100 g
Salsa de soja: .................... 100 ml
Jugo de naranja: ................ 100 ml
Jugo de limón: ................... 50 ml
Aceite: ................................. cantidad necesaria
Orégano: ............................ 1 cda mediana
Jengibre: .............................. 25 g
Ajo: ...................................... 1 diente grande
Acompañamiento:
Arroz blanco: ....................... 200 g
Tomates cherry: ................... 200 g
Preparación:
1. Comenzamos preparando la salsa, introduciendo en un pequeño bowl una cda. grande bien colmada de una pasta de ají amarillo. Hay muchas marcas de este delicioso producto peruano, incluso lo pueden hacer ustedes con ají amarillo fresco salteado y licuado, pero el más fácil de conseguir en Buenos Aires es un sobrecito de 30 g de "Amarillín", pudiéndolo encontrar en muchas verdulerías diseminadas alrededor de la ciudad, los supermercados del Barrio Chino y el Mercado Andino de Liniers.
2. Seguimos agregando igual cantidad de mostaza, dándole además el toque picante con una salsa mexicana de Chile Habanero. Ustedes pueden reemplazarla con salsa picante o chile que más les guste.
3. Sumamos partes iguales de jugo de naranja exprimido y salsa de soja - 100 ml c/u, además de una cda. mediana de orégano seco. Mezclamos bien y reservamos.
4. Ahora nos ocuparemos del pollo. Para esta oportunidad utilicé las alas de 6 pollos. O sea, 12 alas que cortadas al medio rinden 24 piezas, justo 8 por comensal.
Lo primero que debemos hacer es separar las alas de las carcasas (parte central en donde se encuentran las costillas del animal). No vamos a utilizar las carcasas para esta preparación, pero las podremos congelar y utilizar posteriormente para hacer un buen caldo.
Lo primero que debemos hacer es separar las alas de las carcasas (parte central en donde se encuentran las costillas del animal). No vamos a utilizar las carcasas para esta preparación, pero las podremos congelar y utilizar posteriormente para hacer un buen caldo.
5. Seguimos cortando la punta de cada una de las alas, pasando el cuchillo justo sobre la articulación para no tener que romper ningún hueso. Las puntas simplemente se descartan porque no tienen ninguna utilidad, es simple hueso con piel.
7. Luego separamos los "muslitos" del extremo más huesudo del ala. Aquí quizás sea más difícil encontrar la articulación a simple vista, pero podemos dejarla expuesta fácilmente tirando ambas partes hacia el lado contrario del que la articulación hace el movimiento para cerrarse.
Con un pequeño y no muy fuerte movimiento, la dislocaremos fácilmente, dejándola expuesta. Finalmente será muy fácil terminar de separarla con el cuchillo.
6. Con un cuchillo bien afilado, hacemos un corte en redondo sobre la piel cercana a la articulación hasta cortar todos los tendones. Luego raspamos el hueso tirando la carne hacia abajo, hasta dejarlo bien expuesto. Pueden optar por retirarle la piel o no. En mi caso prefiero quitársela a esta parte del ala y dejársela a la parte que tiene menos carne.
7. En un Wok o sartén profunda volcamos abundante aceite y lo calentamos a llama viva hasta que alance una temperatura elevada. Como los muslitos por ser más gruesos tardarán más en freírse, es bueno comenzar por ellos hasta lograr un buen dorado.
8. Retiramos los muslitos del aceite y los posamos en papel absorbente para que drenen el exceso de aceite. Luego hacemos una segunda tanda de fritura con las piezas menos carnosas.
9. Una vez doradas todas las piezas, retiramos casi todo el aceite, apenas dejando unas gotas. Bajamos a fuego medio, volvemos a introducir todas las alitas en el wok y las rociamos con azúcar.
10. Ayudándonos con una pinza metálica o con un cucharón de madera, iremos moviendo las piezas para que entren en contacto con el caramelo que se va formando. Deben tener mucho cuidado de no quemar el caramelo porque tomará un sabor muy amargo que arruinará la preparación
11. Una vez caramelizadas las piezas volcamos la salsa que habíamos reservado.
12. Cortamos el jengibre en rodajas, picamos el diente de ajo y se los agregamos a la preparación.
13. Verán como poco a poco la salsa se irá reduciendo, haciendo burbujas cada vez más espesas.
14. Cuando la salsa haya alcanzado una consistencia viscosa, ya tendremos listas nuestras alitas.
15. Solo nos resta emplatar. Utilizamos un aro de repostería para hacer un timbal de arroz blanco. Para que los granos de arroz queden bien separados y "al dente", pueden seguir los sencillos consejos de esta receta. (hacer click aquí)
16. Retiramos el aro y vamos colocando sobre el timbal 4 muslitos y las restantes 4 piezas por porción.
17. Salseamos bien sobre las piezas de pollo y damos color con unos tomates cherry cortados al medio. También pueden agregar un poco de ciboulette picado.
Y ya tenemos lista esta maravilla!!
hola diego son muy ricas , no culpo a tus niñas
ResponderEliminarse comen en cantidad . Hace mucho tiempo que las preparo para mis amigos,agridulce , picantes , caramelizadas , una linda entradita y voy a probar tu receta que seguro como todo lo tuyo es muy buena.Solamente un aporte, con la otra parte del ala tambien podes lograr una seudo patita, el mismo proceso que las anteriores con una diferencia esa parte tiene un pequeño huesito que lo sacas cortando pequeños nervios y apretando hacia abajo ,sale facil y limpito de esta forma todas quedan en forma de "PATITA" mas elegantes. gracias te admiro mucho miguel de moron
solamente una diferencia
Buen Aporte Miguel! Gracias!!
ResponderEliminarDiego, por favor, nunca abandones este blog!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarNo lo hare :)
EliminarBuenas noches Diego, vivo en Colombia y quiero adquirir su libro, por favor me indica que debo hacer y el costo
ResponderEliminarHola Helena, le pido que me escriba a contactoconlodivino@gmail.com y allí le explicaré como podemos hacer con el envío internacional. Saludos!!
EliminarHola !!!.
ResponderEliminarHoy las prepare y son espectaculares
La mezcla de dulce y picante queda buenísima
Seguiré probando tus recetas